Ovidio Roca
“El gobierno
populista no te da algo, si antes no se lo quito o te ayudo a que se lo quites a
otro”. Pukymon.
La
senda del populismo.
En Bolivia sometida al Populismo, se ha creado una neo
cultura del Derecho y la Democracia, de tinte cocalero, avasallador y
bloqueador. Se aplica la formula Evista: Yo le meto nomas, y se empieza a avasallar
y bloquear paralizando toda actividad, exigiendo con razón o sin ella, que se
les concedan todos sus deseos, violando la propiedad y los derechos de los
demás, del ciudadano.
Esta destrucción de la Democracia ya se la analizaba hace 2.370 años en Atenas
y así lo explicaba Isócrates:
“Nuestra Democracia se autodestruye por
abusar del Derecho a la Libertad: Por considerar la Impertinencia como Derecho,
el Incumplir la Ley como Libertad, la Imprudencia verbal como Igualdad y la
Anarquía como Felicidad”.
Comenta un ciudadano latinoamericano: “Con la peste
populista en el Gobierno, las masas okupan nuestras casas, invaden
nuestras calles, se apoderan de nuestras tierras y propiedades. La policía no
se atreve a combatirlos y varios medios de comunicación los defienden. Entre
tanto a nivel local e internacional seguimos discutiendo, aunque ya hemos perdido
la batalla pues no hacemos nada.
Esto ocurrió por nuestra cobardía de no haber querido enfrentarlo y lo que vendrá
luego, será sangre, sudor y lágrimas, como declaro Churchill. Aunque el sudor
no será por la lucha, sino por el miedo.
Les tenemos miedo ahora que son minoría y aun así nos están jodiendo después,
será el pavor. Sera un cataclismo putinesco”.
Estamos avanzando destruimos el ecosistema y
también nos destruimos a nosotros, pues somos una parte inseparable y constitutiva
del mismo.
La
tragedia de los comunes de Hardin señala que los bienes comunes, todo
aquello que no tiene dueño y que por tanto pertenece a toda la humanidad; como
la tierra, los bosques, las aguas, la biodiversidad; siempre se ven
perjudicados por el uso irresponsable y abusivo que hacemos de ellos.
A nivel internacional las posibles soluciones
propuestas para limitar estos impactos sobre el ecosistema, son tanto políticas
como coercitivas: Limitar legalmente el uso de los bienes comunes y hacer
pagar por su mal uso. Aplicar fuertes impuestos por las externalidades
negativas causadas al ecosistema y a la sociedad.
Actualmente en Santa Cruz tenemos un conflicto
por la construcción de una carretera, con un trazo que responde a intereses de
loteadores y comerciantes de tierras, afectando un área protegida y el Parque
Nacional Amboró.
Vecinos de la zona informaron que
los loteadores tienen todo organizado; la toma, el parcelamiento y legalización
de las tierras; ahora solo falta que el camino pase por el lugar elegido y así la
demanda y los precios se disparan y se centuplican.
En realidad en Santa Cruz no existe una oposición a
esta carretera de Las Cruces a Buenavista, sino al trazo elegido que atraviesa una
Unidad de Conservación que alberga los acuíferos más significativos del Departamento
y afecta al ecosistema. Las instituciones y ciudadanos no masistas, consideran
que se debe encontrar una ruta alterna y
han presentado varias opciones.
Lo
que es de todos; no es de nadie.
Por intereses económicos y mezquinos, no se quiere
aceptar que el accionar de las personas sobre el medio ambiente y la quema de
combustibles fósiles impulsa el cambio climático. Esta actitud debe ser rechazada
por las personas responsables y conscientes del evidente daño causado y aún más
ahora, que estamos llegando al límite y es urgente la necesidad de reducir las
emisiones de gases de efecto invernadero.
Para evitar el calentamiento global necesitamos evitar la emisión de gas carbónico
y para esto debemos penalizarla, como a toda actividad que traslada costos a
terceros y afectan los derechos a su vida, libertad y propiedad; como la
deforestación, la contaminación y el uso de combustibles fósiles.
La
sociedad tiene que aprender a defenderse, o perecer.
De la generación del esfuerzo y trabajo creativo,
pasamos a la actual generación progre y pedigüeña, por lo que si queremos
sobrevivir: “Debemos recuperar y seguir la actitud de esa generación, que sin
estudios educó a sus hijos. La que a pesar de la carencia de todo, nunca
permitió que faltara lo indispensable en casa. La que enseñó valores; empezando
por Amor y Respeto y la defensa de sus derechos legales y legítimos.”
ovidioroca.wordpress.com
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