A CAMINAR SE APRENDE ANDANDO

 Ovidio Roca

“Caminante son tus huellas el camino y nada más
Caminante, no hay camino se hace camino al andar.
Al andar se hace camino
Y al volver la vista atrás
Se ve la senda que nunca
Se ha de volver a pisar”. Antonio Machado.

Los países latinoamericanos aún no hemos logrado establecer un régimen político y económico eficaz y estable y actualmente, sobrevivimos apenas, en este Estado plurinacional que ha impuesto el modelo Populista cocalero de odio racial y de economía  extractivista dependiente de las materias primas. Un modelo dictatorial, estatista, enemigo de la iniciativa y de la propiedad privada así como de la institucionalidad democrática, por lo que es insostenible.
El populismo, con el IPSP el Instrumento político cocalero, como parte de su estrategia de poder instrumentalizó las Instituciones para sus propios fines y con esto se eliminó toda confianza y respeto de la población por las Instituciones y se generó en la población el temor y desprecio por ellas pues vieron que:
La Justicia se convirtió en Injusticia.
El Defensor del Pueblo, en Defensor del Gobierno Dictatorial.
Las fuerzas del orden, la policía y ejército, en represores del ciudadano que adversa al gobierno masista.
Los Jueces, en verdugos del pueblo que demanda justicia.
Las bandas de avasalladores en connivencia con la policía y fiscales, en dueños de bienes y haciendas ajenas.
La coca Chapareña para cocaína, en enemiga de la coca Yungueña para acullico. La coca para cocaína es la mama coca y prevalece.

Como parte del show populista, Patty la Inquisidora, es el personaje indígena encargado de presentar los juicios contra los opositores del masismo cocalero. Evo es el personaje e icono insigne del cocalero militante, y tiene el derecho humano de ser Presidente vitalicio, el que además convirtió a la Republica Boliviana en Bloquivia, donde se practica de manera cotidiana el bloqueo, una expresión de la cultura populista cocalera y esto para mantener paralizada y atemorizada a la población.

Todo esto bajo la consigna, ¡Kawsachun coca, wañuchun q’aras!.

Los masistas tienen un discurso filocomunista pero practican un capitalismo salvaje, del cual vive gran parte de la población que realiza actividades informales y riesgosas como el contrabando y especialmente del negocio de la coca y el narcotráfico. Las camarillas y corporaciones más cercanas a la cúpula masista, viven cómodamente del Estado y con menos riesgo y así está engordando la burocracia y las pegas públicas.

 Para afirmarse en el ejercicio del poder, los masistas no reconocen ni respetan al ciudadano y debilitan y corrompen a las Instituciones democráticas y así generar incertidumbre y temor a la población. Para evitar la unidad nacional, han implantado y exacerbado una política de odio entre los ciudadanos de las distintas regiones, usando el racismo y las separaciones de clase y lo están logrando. Esto conlleva a que la política se aleje de una cultura del diálogo, del respeto a las Instituciones y se practique el centralismo sin ninguna independencia de poderes. Con esto se alimenta la polarización y por ende se debilita nuestra democracia y ellos se afirman en el poder.

 Bajo este modelo político y económico el país no irá hacia adelante, hacia su bienestar, la pobreza se extenderá, el narcotráfico reinará y el Gobierno aplicara indiscriminadamente la fuerza contra la población opositora utilizando para ello el aparato del Estado, la fuerza pública y a los grupos irregulares armados, como lo vemos en Cuba, Venezuela, Nicaragua, etc.

Hugo Chaves en uno de sus primeros discursos explicaba cómo se conquista y se mantiene el poder: “La Revolución Socialista democrática y pacífica que el pueblo de Chile comenzó a impulsar a comienzo de los setenta y que fue liderada por el Presidente Salvador Allende, lamentablemente era una revolución pacífica y también fue una revolución desarmada y bastó que saliera un General a dar una orden y cercenaron el proceso chileno.
Lo lamentable no es que haya sido pacifica, lo lamentable es que estaba desarmada, y ahora yo les digo a los opositores venezolanos, no se equivoquen porque la Revolución nuestra y a diferencia de la chilena de los setenta, es pacífica y democrática, pero con una profunda diferencia: ¡Aquella estaba desarmada y la Revolución bolivariana está armada!, para defender los logros, para defender su avance, para defenderse de las amenazas y de las conspiraciones”.

 Debemos considerar que para salir de esta crisis económica y social, los bolivianos necesitamos encaminarnos hacia un Estado Federal democrático acorde a la idiosincrasia de los Departamentos y esto requiere generar confianza, fortalecer las Instituciones del país y educar a la población en la tecnología, la responsabilidad y el trabajo.

El pueblo, la sociedad ha comprobado reiteradamente que las instituciones: la justicia, el poder judicial, la policía y ejército han sido corrompidas y están sujetas a las órdenes del Gobierno y cuando una sociedad no cree ni confía en nada ni en nadie, se produce una anomia, anarquía y un país inviable, por lo que debemos recuperarlas. Una de estas instituciones y la más importante en el ámbito político, además de la  justicia son los Partidos políticos, los que deben actuar en base a una doctrina democrática y con programas viables, económica, social y ambientalmente y no en función de personas.
Con esto tenemos un problema, pues la oposición democrática no ha logrado encontrar un liderazgo nacional que los una y no se está trabajando en propuestas viables para reconstruir la economía del país y la confianza de los ciudadanos. Los líderes demócratas no logran ponerse de acuerdo para enfrentar unidos al masismo cocalero, que sabemos está bien armado y muy bien “narco financiado”, por lo que necesitamos elaborar una estrategia nacional y con fuerte apoyo internacional.

De seguir como estamos puede ocurrir lo mismo que en Venezuela, que reaccionaron tarde ante los dictadores y su gobierno persiguió y encarcelo a los opositores y los ciudadanos desesperados huyeron hacia otros países democráticos.
Es por tanto necesario actuar como dice Manuel Morales miembro del CONADE: “Lo que nosotros estamos planteando es que al MAS no solamente hay que enfrentarlo y derrotarlo en las calles, sino también en las urnas. Por eso es que hay que tomar frente a la gravedad de los acontecimientos, la decisión de propiciar la construcción de una alternativa política para el 2025, ganarle en las urnas al MAS con una renovación absoluta de todos los liderazgos del país”.  
ovidioroca.wordpress.com