Ovidio Roca
Los planes son la visión y la guía para
el desarrollo de un país y luego viene lo más importante la decisión de los Gobiernos
de implementarlos, pues es con obras y no con promesas que se consigue el
desarrollo de los pueblos. Planes y concreciones que ahora durante el populismo
brillan por su ausencia.
De estas propuestas para el desarrollo del oriente, conozco al menos tres: El Memorándum de 1904, El Plan
Bohan de 1942 y El Plan Inmediato del Gobierno de la Revolución Nacional de
1953, que fue el único que fue asumido y ejecutado por el Gobierno y la
comunidad emprendedora.
El Memorándum de 1904, señala los peligrosos senderos que tomaba por entonces
la clase dominante y centralista, cuya visión se reducía a un modelo
minero-extractivista basado en ineficientes estructuras económicas heredadas
del periodo colonial, visión que continua hasta hoy.
El Plan en su contenido hace especial énfasis en la idea de potenciar el
desarrollo de las fértiles tierras del Oriente boliviano y se basaba en lograr su plena integración con el resto del país por medio de
ferrocarril (proyecto que nunca llegó a concretarse) y tenía como objetivo
final enlazar el comercio nacional con el Océano Atlántico por medio de los
ríos Paraguay (Puerto Bush) y el rio Pilcomayo, hasta el rio de La Plata y el
océano Atlántico.
El Presidente en esa época era Ismael Montes.
Lo importante, es que este Plan fue
implementado inmediatamente por el Gobierno del MNR con lo que se integró a
Santa Cruz con los mercados, lo que permitió desarrollar la actividad
productiva que llevo a Santa Cruz a ser una parte fundamental del sustento del
país.
Cumpliendo con el Plan, se realiza el
asfaltado de la carretera Cochabamba a Santa Cruz y el puente sobre el río
Piraí, se instala el Ingenio Guabirá y con apoyo de los EEUU se establece el
Servicio Agrícola Interamericano (SAI) que alquila maquinaria agrícola a los
agricultores a precios bajos y pago con la cosecha, lo que permite ampliar
rápidamente las áreas cañera y luego arroceras y maiceras. También se promueve
un programa de migración nacional y externa con buenos resultados.
Con la apertura de las vías de
comunicación y los programas de desarrollo agropecuario y mecanización
agrícola, la región tuvo acceso a los mercados y como consecuencia la
producción agropecuaria y agroindustrial creció exponencialmente y Santa Cruz
se convirtió en el centro más dinámico de crecimiento económico y poblacional
del país y continua siéndolo hasta ahora.
Vale recordar que Santa Cruz de la
Sierra en el año 1950 tenía una población de alrededor de 47 mil habitantes. Un
pueblo que había vegetado durante cuatro siglos en su aislamiento y su pobreza
y que recién el año 1954 con la conclusión de la carretera asfaltada desde
Cochabamba se abre el mercado hacia occidente para la producción agropecuaria
cruceña, y por tanto la posibilidad de su crecimiento y desarrollo. La llegada
de los ferrocarriles de Brasil y Argentina, países industrialmente más
desarrollados amplía su mercado, aunque de inicio frenan la industrialización
regional por la competencia internacional para lo que no estaban preparados. Actualmente
la población de Santa Cruz de la Sierra es de más de 1.8 millones de habitantes,
es decir 38 veces mayor que en 1950.
ovidioroca.wordpress.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario