Ovidio Roca
La
política económica bajo el populismo cocalero, es aquella donde las Inversiones
se orientan, no guiadas no por el mercado y la rentabilidad, sino por las coimisiones.
Pukymon.
El milagro de receta económica, populista y cocalera.
La teoría del mercado, explica que si se demanda una mercancía o
una moneda y esta escasea, el precio que se debe pagar para adquirirla aumenta.
En Bolivia comprar dólares legalmente tendría que hacérselo en el
Banco Central quien guarda las reserva del país; entre éstas el oro y los
dólares. Como actualmente hay pocos dólares y se los necesita, habría que
ofrecer más bolivianos por el billete verde para adquirirlos. Eso no ocurre,
pues casi nadie compra dólares del Banco Central sino del Chapare, donde los
masistas minan no bitcoins sino coca y cosechan dólares en efectivo por sus
ventas de pichicata.
Esta actividad tan productiva no figura en los registros
económicos, pues son invisibles. Se menciona que son más de cuatro mil millones
de dólares en efectivo los que ingresan cada año de contrabando autorizado, en
q'epis y contenedores y esto es lo que produce el milagro económico populista
del país sin inflación.
Según algunos analistas opositores, la administración
de Luis Arce pretende construir nuevos Elefantes blancos y esto a pesar el
elevado déficit fiscal existente, la falta de recursos económicos que tenemos y
aun peor en un escenario de crisis nacional e internacional, tanto pandémico como
bélico.
Ya tenemos una Planta de Urea que costó casi mil
millones de verdes y la misma “para en continuo paro”.
Esta Planta contra toda lógica empresarial, fue localizada lejos de las
materias primas y de los mercados y por intereses políticos y ll´unkus se la
instalo en el Califato, más bien el
Evocato del Chapare, donde anteriormente se construyó un Aeropuerto
Internacional cocalero.
Pese a que esta iniciativa no genero ganancias sino
perdidas, el Gobierno Plurinacional anunció la construcción de la segunda Planta
de urea, y cuatro plantas de biodiesel y una más de fertilizantes, para
aumentar así los continuos paros, perdidas y también comisiones.
YPFB informó además, que su subsidiaria YPFB Refinación, ya se adjudicó (sin
licitación) la construcción de cuatro
plantas de biodiesel por 387,5 millones de dólares.
Las empresas estatales están en auge.
El Gobierno construirá una planta de
industrialización de soya para “no depender” del sector privado. La inversión será de
Bs 424,4 millones y el complejo productivo se construirá en el Municipio
intercultural de San Julián, un bastión del MAS en el Departamento de Santa
Cruz.
Según la autoridad estatal, esta obra beneficiará a 7.000 granjas avícolas.
Adicionalmente, también se ampliara la
Planta de industrialización de coca del Chapare, esa da utilidades.
El 2008 el Gobierno de Evo Morales decidió que el Estado populista maneje toda
la cadena productiva del litio y sin intervención de empresas extranjeras. La
promesa fue que Bolivia crearía fábricas de baterías y hasta autos eléctricos;
han pasado 14 Años y según The
Economist, se gastaron 930 millones de dólares y lo que vimos es que se
cobraron buenas comisiones y como país conseguimos más deudas.
El año 2011 Lucho Arce siendo Ministro de Evo, con
visión estatista y populista creo EMAPA, para controlar el precio del maíz.
Ahora no abunda el maíz, ni los pollos y las pollas, por lo que todos se están
quejando.
El 2022, el Presidente Lucho Arce, ahora más liberal
busca concretar alianzas estratégicas con empresas privadas extranjeras,
que ofrecen la tecnología necesaria para que despegue el negocio del
litio y su industrialización. Esperamos que todo vaya bien.
La expedita justicia populista.
En Montero, un joven fue acusado de robar dos bolivianos de
un minibús estacionado y fue condenado ipso facto, a cuatro años de cárcel.
No
le alcanzaron los dos bolivianos (28 centavos de dólar) para comprar su
libertad. Hay que robar millones de dólares para pagar la cuota y evitar ser
encarcelado.
ovidioroca.wordpress.com