MURUCUNTRULLO

Ayer nos visitó un amigo y traía de regalo algo que agradecimos mucho, una bolsita de arroz. Luego me comento mi esposa; espero que llegue alguien trayendo azúcar y un murucuntrullo, pensé yo.
En las épocas de pobreza y del murucuntrullo (choquezuela), este se usaba para dar sabor al caldo y se prestaba entre los vecinos “pero para una sola champada”. Tiempos idos y ahora tan cercanos gracias a estos nuestros aprendices de brujos que aplicando sus estrambóticas recetas económicas social-indigenistas han logrado la destrucción del aparato productivo, el desabastecimiento alimentario y aumentar la pobreza. Todo esto pese a haber recibido “de arriba” los ingresos financieros más importantes de la historia del país, gracias a los altísimos precios internacionales de las materias primas.
Los socialistas tienen fijación por el control de todo y de todos, pues allí consideran que está el poder. Y los economistas masistas no se quedan atrás, escuchábamos hace poco que se pondrá código de barras a las bolsas de azúcar para controlarlas y evitar que éstas lleguen de contrabando al Perú; lo mismo harán me imagino con las bolsas de cemento, de leche, de arroz y los chicharrones y aviones de Vallegrande antes que alcen vuelo.
Con su receta estatista y antimercado los masistas han logrado espantar a los inversionistas y expropiar y amedrentar a los productores y por ende disminuir la producción. Están obsesionados (sin tener los instrumentos) en controlar los precios, la producción, la comercialización de toda producción licita, especialmente de alimentos y no así de la coca y sus derivados.
Cualquiera sabe que nadie trabaja a pérdida y si algo no da ganancia se lo abandona. Por eso es lógico que si los productores se ven obligados a vender a pérdida dejaran de trabajar en la agricultura, la ganadería, la manufactura, los hidrocarburos, la minería y así por delante.
Quedarán las actividades que dan ganancia: las pegas gubernamentales, la coca y sus derivados y el contrabando que moviliza los dólares de la cocaína. Y entonces la solución siguiendo el modelo Venezolano, es importar y subvencionar los productos. Así se crea una burocracia estatal de comercializadores como “Emapa” que sigue el modelo de “Mercal” de Venezuela, donde este sistema enriquece a los hermanos bolivarianos que desvían los productos al mercado negro y peor aun, por su incapacidad de gestión los productos se deterioran y son arrojados a la basura. El problemas es hasta cuando y con que$$$??.
El gobierno quiere llevarnos al pasado: en occidente al ayllu de felices esclavos masticadores de coca y en el oriente volveremos a las épocas de antes, cuando en los pueblitos rurales los regalos “finos” de cumpleaños eran: Jabón Lux, Kolinos y los más apetecidos por todos: duraznos al jugo. Pensando en nuestra realidad actual, la esperanza es que llegue alguien con un paquete de regalo y al abrirlo encontremos una hermosa Yuca, de esas de 90 Bs. la @.
Cuando la mitad de las personas llegan a la conclusión de que ellas no tienen que trabajar porque pueden recibir lo que requieren sin esfuerzo, y cuando la otra mitad se convence de que no vale la pena trabajar porque alguien les quitará lo logrado con su esfuerzo, eso… mi querido amigo… es el fin de cualquier Nación.
Dr. Adrian Rogers, 1931

CRÓNICAS DE MURUNDANGA: UNA VISIÓN EXTERNA DEL PAÍS

Este cuento no guarda relación ni hace referencia a ningún país americano, cualquier semejanza es pura fantasía. Se aconseja leerlo al son de Burundanga de Celia Cruz*
Un amigo recién llegado del país de Murundanga, me comentaba sus vivencias y aprendizaje para sobrevivir, medrar, estudiar y divertirse en ese exótico y bello país allende los mares, montañas, selvas y desiertos, donde las piedras en pleno éxtasis sexual llenan la noche de estrambóticos sonidos.
Es un país difícil, plurimúltiple y psicodélico, me decía; un país al que le han echado burundanga y vive el delirio de su retorno al mítico pasado indígena comunitario. Es un país digno de estudio, no tiene las violencias y miseria extrema de los países arábigos o africanos y es un territorio de nativos manejables y asequibles a la investigación.
Hay campo para todos: algunos van allí a probar teorías sobre los estados tribales, el comportamiento de las masas, el de la personalidad ante el poder, el socialismo comunitario, la economía sin costos, los rituales primitivos y esotéricos, el sexo de las piedras y también van otros por simple afán de aventuras o por lucro. En fin, para salir un poco de su país que se esta volviendo aburrido con ese europeismo bobo.
Si algún momento se te ocurre ir por allí me decía, debes entender que hay que ser pragmáticos. Es un país de indios y los indios son así por naturaleza y también por culpa de los países capitalistas y los curas. Ahora con nuestra ayuda están rompiendo con el capitalismo y van a construir su utopia y mientras esto ocurre, pues puede durar mucho tiempo, es posible estudiarlos. Hay espacio para todos: sociólogos, antropólogos, cientistas políticos, buscadores de emociones, narcotraficantes, especuladores pues ganar unos pesos no esta mal; en fin no te preocupes hay espacio para todo y para todos y si algo malo ocurre vuelves a Europa o a los Estados, pues finalmente no hay nada mejor que vivir como la gente y en países civilizados.
Para sobrevivir allí, lo primero que tienes que hacer es olvidar todas las reglas o normas que aprendiste o creías saber; necesitas entrar en el mundo de la amnesia y abrir tu mente, mejor usando la burundanga, a la nueva lógica cósmica del modelo socialista, original y pachamamico.
Lo primero que descubres al llegar, es eso que se llama anomia. Los nativos desconocen las leyes y desconfían de los jueces, de las autoridades, de la policía, de sus vecinos y de ellos mismos. Conviven con la inseguridad y sufren estoicamente la impunidad de la delincuencia. Por ello la población y las personas necesitando adaptarse, se integran en sindicatos o logias y crean sus propios sistemas de protección y autodefensa que les permita sobrevivir, los que no lo hacen perecen (Darwin).
El deporte tradicional es el llamado tiro al pichón o la caza del opositor. Para este juego los jefes pluritribales inventan leyes y ellos pueden cambiarlas cuando “le canten las bolas”. El opositor es culpable, lo es desde el inicio y no conoce las reglas que se le aplicarán, aunque ingenuamente cree que valen las antiguas que el conocía o las de las convenciones internacionales, ¡que la inocencia le valga¡.
No debes ser ingenuo y pretender pensar y razonar libremente, como si estuvieras en estos nuestros países reaccionarios y capitalistas que manejan el discurso ambivalente de respeto a los derechos humanos y la democracia. Estas en un país pluridiverso y estimulante; cada día vives una aventura mortal, todo es excitante y es que tienes que vivir el hoy, pues el mañana es incierto y no hay nada que lo garantice. Algunos individuos y familias desubicadas sufren y se quejan al ser victimas de la justicia socialista comunitaria; esperen conocer lo orgásmico que será la justicia originaria y cósmica.
En este ambiente de cambio revolucionario debes entender que todos los esquemas de formalidad, legalidad, seguridad y respeto a los convenios y contratos que alguna vez te enseñaron, son reaccionarios y capitalistas. Se trata de mitos neoliberales, rémoras del imperio.
Aprenderás a valorar el desafío de la incertidumbre que templa el espíritu y te enseña el arte de la supervivencia del más apto y el más adaptable, lastima que la mayoría no supere la prueba. Para mostrar estos logros a los habitante de países como los escandinavos que son aburridos pues todos lo tiene seguro, se debería promover el turismo aventura, especialmente para los “progre” europeos que contribuyeron a crear este país pluritribal y estrambótico.
Un asunto impactante es que todo individuo reaccionario y ajeno al régimen, por principio es culpable y cada momento debe demostrar su inocencia; peor si critica al amado líder o lidereza, pues en ese momento es elegido como presa para el juego: la caza del opositor. En contrapartida, todo es válido si perteneces a los movimientos originales y los partidarios del gobierno. Por tanto para sobrevivir necesitas asimilarte y jugar con las nuevas reglas, siempre cambiantes. La única que no cambia es que necesitas estar en sintonía con el gran jefe y amadísimo líder.
Pese a su anomia, irónicamente es un Estado formalista, miles de estudiantes pululan por las facultades de Derecho, pues a los indígenas y al gobierno les gusta el litigio, aunque nadie cumple en lo más mínimo con la Ley. Permanentemente necesitas hacer algún trámite, pues cada día se inventa uno nuevo y para evitar dilaciones debes contratarte un huayra leva gestor, que es el que sabe “a quién y cuánto darle”, de otra manera vas a estar pagando al fósforo y caro.
Debes entender que todos los cargos donde se puede “sacar algo”, han sido obtenidos de forma original, pagando un precio justo a los funcionarios del régimen y los más jugosos, por equidad son adjudicados por periodos máximos de tres meses, buscando dar chance a los otros hermanos del sindicato a entrar al “pasanacu”. Durante ese periodo el adjudicatario tiene que recuperar su inversión y réditos multiplicados.

Como parte del proceso de descolonización y para retornar a la cultura original se ha desincentivado la educación occidental, la técnica y se menosprecia el trabajo profesional. El profesionalismo en las instituciones del Estado ha desaparecido, los nuevos requisitos son: ser originales de alguna tribu siempre que esta sea la del amadísimo líder y fieles y sumisos al partido de gobierno. El resultado es funcionarios que utilizan su posición para recibir prebendas y no solo corruptos, sino de una total ineficiencia.
Existe una nueva economía, las autoridades del proceso de cambio son más inteligentes que el mecanismo de mercado y buscan eliminarlo, pero cuando todo falla se pide a dios que bajen los precios, esto lo hace alguna ministro apoyada por el Yatiri mayor y previo sahumerio. Descubrieron también que las empresas públicas mágicamente no incurren en costos y es buen negocio cuando se las compra y luego son fuente de pegas para los hermanos y hermanas.
Si eres un inversionista y aventurero y decides establecer una empresa minera, debes como en cualquier otro país obtener permisos, realizar inversiones, tener planilla de personal, pagar impuestos y cumplir las normas ambientales. Pero luego viene la diferencia, adicionalmente en el estado pluritribal debes satisfacer las exigencias y las exacciones de los dirigentes de los movimientos originales y de algunos ministerios, luego de todo esto, no tienes ninguna seguridad que se respeten los contratos, invadan tu propiedad y en el mejor de los casos te la estaticen. Por tanto para no meterte en estas pellejerías, realizar inversiones que te las pueden expropiar luego, lo mejor es trabajar en negocios donde no eres propietario de nada. En Murundanga, no debes tener ningún patrimonio.
En el campo de la actividad minera revolucionariamente se ha desalentado la empresa de alta inversión y tecnología y en contrapartida se ha desarrollado un nuevo modelo minero corporativista que no necesita inversiones ni tecnología, que maravilla!!. Son grupos informales que aprovechan los trabajos e inversiones realizadas anteriormente por algún empresario, que luego las abandonó voluntariamente, vale decir fue echado de las mismas. Algunos críticos han manifestado que estas seudo cooperativas mineras hacen sus trabajos en forma precaria, sin inversión ni tecnología y viven de los desechos de anteriores explotaciones, con gran daño ambiental. Pero se ha comprobado que esto es prédica destructiva de algunos neoliberales.
Como los grupos originales no necesitan licencia ambiental, aprovechan los recursos sin necesidad de permiso alguno, pues los recursos son de la comunidad, ninguno es propietario individual y por tanto no tienen responsabilidad sobre nada y se mueven de un lado a otro de acuerdo a las oportunidades. Por tanto es aconsejable y ventajoso trabajar con estos grupos informales y originales. Por ejemplo en asuntos de intermediación, usando tu conocimiento del negocio y tus contactos. Recibes mineral de los originales del lugar y de los cooperativistas, realizas los contactos para que lo fundan, comercializas el metal y cobras tus comisiones.
Si tienes una empresa maderera o una concesión forestal, vende la empresa, devuelve la concesión y compra árboles en pie de las comunidades originales, así no tienes que complicarte la vida. Luego es fácil conseguir los CFO, se venden baratos y así no tienes problemas en las trancas, aunque es recomendable dejar siempre la propina, pues no olvides que ese sacrificado tranquero compró su cargo y además debe pasar una parte de sus comisiones al de arriba.
Si en tu propiedad hay un área boscosa, debes talar todo, vender la madera fina y quemar el resto. Si mantienes el bosque no justificaras la función económica y social y por tanto será revertida al Estado.
No es conveniente tener una empresa de transporte. Lo correcto es ser miembro de un sindicato o gremio de transportistas. Necesitas pagar tu derecho de afiliación al jefe del sindicato y luego puedes tener los camiones o buses que quieras, debes inscribirlo bajo el registro único así no pagas impuestos y si hay problemas le pagas a quien corresponde. El sindicato funciona como una logia, el gremio te apoya hasta las últimas consecuencias. Para estar en buenas relaciones con los caciques gremiales debes estar dispuesto a realizar marchas y participar en los ayunos, de una a dos horas y luego pones un reemplazo, que a su vez pone un reemplazo, lo importante es que permanentemente haya varios ayunadores hasta las últimas consecuencias.
No intentes dedicarte a empresas de manufactura pues es incompatible con la actividad más eficiente y de larga tradición del país, el contrabando hacia adentro y hacia afuera. Sacrificados originales recorren las fronteras y aun más allá, usando todos los medios de transporte, desde llamas, burros, camiones, aviones, ferrocarril y todo tipo de envase desde mamaderas y botellas de coca cola, q’uepis, hasta grandes contenedores. Se tiene programado importar camellos de Irán.
En el Estado pluritribal y debido al contrabando puedes tener todos los productos que produce oriente y occidente y a precios rebajados. Puedes ver las películas en DVD, antes que se estrenen; libros y equipos recién ofertados, en fin este es el paraíso del consumo chicha. Existe también una actividad sagrada y milenaria que surte billetes verdes para financiar el contrabando y este es el pilar fundamental del proyecto original. En fin es una vida plena de peligros e incertidumbre, pero excitante para el que pueda aguantarla.
Lo que no logro entender, me decía este mi amigo europeo, fanático de las emociones fuertes y el turismo de aventura, es porqué este país tan dinámico e interesante es abandonado por sus habitantes y el que puede sale corriendo. Parece que a varios los están metiendo presos y eso no les gusta, este país es solo para espíritus fuertes y aventureros.
Todo el tiempo es una aventura me comenta; por ejemplo tiempo atrás fui con unas amigas cuarentonas, tipo “pan sin suerte”, recién llegadas de Dinamarca. Participamos en una marcha indígena en una zona altiplánica, veía a mis amigas vestidas de indígenas, sofocadas por la altura, con las mejillas enrojecidas, sus voces roncas de gritar contra el imperialismo y sus pichones. Cuando llegamos al pueblo destruimos camiones, tolderías, marquesinas, autos, golpeamos muchos tontos que se asustaban en lugar de sumarse al movimiento.

Era una belleza escuchar el rugir de los nativos, el olor de la exaltación, de la caminata, la euforia de la adrenalina. Todo esto me lleno de emoción, nada que ver con mi país que la gente trabaja, y luego va su casa burguesa y se conecta a sus aparatos electrónico y su mayor emoción es la bebida o alguna droga. Cuando mis amigas volvieron a Europa y contaron su aventura salvaje, incentivaron para que vengan más turistas, las que ahora andan por ahí.
Finalmente Celia Cruz:
Por que fue que songo le dio a borondongo
Por que borondongo le dio a Bernabé
Por que Bernabé le pegó a fuchilanga
Por que fuchilanga le hechó a burundanga
Por que burundanga le hincha los pies.

Y AHORA QUÉ (Después del gasolinaso)

Y AHORA QUÉ (Después del gasolinaso)
Ovidio Roca 2011-01-02
El sentido común, que es conocimiento popular acumulado, señala que no es posible mantener artificialmente bajos y por mucho tiempo los precios de los bienes y servicios, y la economía nos dice que si queremos influir sobre los mismos es mejor hacerlo a través de los mecanismos de mercado: promoviendo la oferta, incentivando la producción, la productividad o facilitando el abastecimiento. También es posible hacerlo mediante la imposición, con el monopolio o mediante el control estatal; esto ya lo vimos y lo vemos en todos los países comunistas, conduce al fracaso económico y a la corrupción desmedida.
En Bolivia el precio de los combustibles fue mantenido artificialmente bajo y ningún gobierno anterior al MAS, los “neoliberales” por su debilidad y cierta dosis de populismo no se animaron a ajustarlos y quien intentó subirlo no se mantuvo en el poder. No olvidemos que Evo es el único gobernante que ha tenido más del cincuenta por ciento de votación y el control absoluto sobre el parlamento y los otros poderes del Estado, además del apoyo militante de cocaleros, contrabandistas y otros especímenes.
Por otro lado es conocido que cuando algo se mantiene presionado y se lo suelta bruscamente, causa turbulencias y explosiones, por lo que la manera más segura para bajar la presión es hacerlo regular y lentamente.
El gobierno masista con su fortaleza política y en una coyuntura de altos precios internacionales para las exportaciones nacionales, pudo hacer ajustes graduales a los precios de los hidrocarburos y sus asesores sabían de esto. Pero por su esencia populista se mantuvo la política de subsidio a los combustibles, que Evo obtiene a crédito pero a precios internacionales de su amigo Chávez.
Cuando éste presionado por sus problemas de liquidez interna le pidió cuentas a Evo y le exigió que empiece a pagar, los asesores q´aras de Evo (que también fueron asesores de los neoliberales) le dieron la receta del “ajuste”, de ninguna manera un gasolinaso que es una medida neoliberal. Evo con dolor profundo de su corazón sindicalista tuvo que aceptarlo y para no dictar la medida “peló” en su avioncito de 40 millone$ y gasolina gratis y dejó el paquete masista a cargo del Alvaro.
Los movimientos sociales, buenos alumnos del gran bloqueador, logran la reversión de la medida. Los transportistas aprovechando la coyuntura subieron en un cien por ciento sus tarifas y se retiraron de las movilizaciones contra el gobierno esperando como premio que les acepten sus tarifas. En esta coyuntura cada uno jugó sus cartas para no hundirse, salvo el pueblo que tiene ingresos fijos y presionado por el estómago reaccionó violentamente como le enseñaron a hacer en un Estado donde no hay institucionalidad.
Aunque no se lo esperaba, Evo reculó y esto me recuerda un dicho de la Venezuela de antes de Chávez que dice “chivo que se devuelve se esnuca”, queriendo expresar que cuando el chivo toma carrera y vuelve bruscamente se cae y se rompe la nuca.
En el fondo todos sabemos que esta medida de ajuste de precios e incentivar las inversiones petroleras para aumentar la producción, es absolutamente necesaria; los políticos de oposición también lo saben pero se opusieron a la medida, sin explicar sus argumentos.
El tema del ajuste de precios no está en hacerlo o no hacerlo, sino cómo y cuando. Por ejemplo cuando hay una infección y hay que operar, la operación la debe hacer un cirujano con piense y sapiencia; preparando con tiempo al paciente, dándoles antibióticos, aplicando una correcta asepsia, usando los instrumentos adecuados y por ejemplo en una operación de amígdalas, hacerlo por el lado correcto, por la boca y no metiéndole la mano por atrás y sin asco.
El Gobierno no tiene plata con qué seguir subsidiando los combustibles, difícilmente Venezuela podrá mantener a crédito este suministro, entonces los masistas tendrán que buscarla donde sea: la pueden quitar a las gobernaciones y municipios; parando algunos proyectos; mediante endeudamiento publico; usando recursos de los fondos de pensiones; pueden también aumentar los impuestos (absurdo en un país de economía informal en casi un ochenta por ciento); pueden usar las reservas internacionales, aumentar la emisión monetaria y de paso generar inflación. Buscarán bajar el precio del dólar para abaratar las importaciones pero al fin no podrán lograrlo y el dólar tenderá a subir, especialmente si Dilma decide controlar las fronteras del narcotráfico, fuente de los dólares que circulan en la economía nacional y que evitan la demanda de dólares al Banco Central; en fin la cosa se va a poner color de hormiga.
Lo que se viene, más a la corta que a la larga, es desorden, los precios que suben no bajan, luego un desabastecimiento de combustibles, colas y mercado negro, movilizaciones y anarquía. Los que pueden deberían volcarse masivamente a transformar sus vehículos a gas y eso implica que deben haber más estaciones de gas y más provisión de gas y la pregunta del millón es: como lo van a hacer si no hay más inversiones en la cadena de hidrocarburos.
El problema de los países victimas de las dictaduras es que éstas destruyen la institucionalidad y la moral ciudadana y toda forma de oposición, y cuando se derrumban por sus propios errores, inviabilidad e incompetencia, se produce el caos y no hay quien se haga cargo del muerto.
El sistema se cae casi siempre por la propia incompetencia e inviabilidad y no por la oposición, y luego el problema es la transición. En algunos países comunistas, al caer el sistema el poder recayó en los que estaban más organizados: las mafias y las agencias de represión. La ciencia ficción trató este tema en la saga de las Fundaciones de Asimov, preservando el saber y conocimiento para la reconstrucción del imperio, luego de la caída del “mulo”.
Por ahora el reto actual y urgente, es que la sociedad civil y los partidos políticos democráticos trabajen en un plan de emergencia económica y en un pacto de unidad regional y nacional, para manejar y ordenar el caos que se nos viene.